Este artículo está divido en dos relatos desde dos puntos de vista distintos respecto a lo que ocurrió el viernes 28 de febrero en Mochuelo Alto, donde se llevó a cabo la Audiencia Pública convocada por la CAR – Corporación Autonoma Regional – y la UAESP – Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos – para tratar el tema de la ampliación del Relleno Sanitario Doña Juana. Un punto de vista está dado por Cindy Garcia de la UAESP, y el otro punto de vista está dado por Marcela Muñoz, de la Veeduría Distrital
Suena la alarma a las cinco y cincuenta y tres de la mañana, de manera sorpresiva me levanto con bastante energía (luego de una semana pesada de trabajo) y a la expectativa de lo que iría a suceder en el día. En parte volver a Mochuelo Alto me emocionó, conocí esta parte de la ciudad hace 6 años cuando trabajaba allí con una ONG que precisamente trabajaba en contra de la expansión del relleno sanitario doña juana (RSDJ), volver 6 años después con la entidad que quiere la aprobación de la optimización del relleno me produjo sentimientos encontrados.
Llegue al tunal a las 7:15, me fui un poco ligera de ropa y pensé que morirá de frio durante la audiencia. Había un bus que nos subiría y allí me monté. Mis compañeros fueron subiendo uno a uno. 20 minutos mas tarde ya habíamos llegado. Una vez arriba me puse la camiseta de la entidad, ¿mi pensamiento? fue preguntarme el por qué me es tan difícil convencerme de las cosas, aunque tenía la camiseta puesta una parte de mi estaba insegura de usarla y se sentía como un lobo con piel de oveja. Sin importar ello –y porque la camiseta me daba calor- mi espíritu colaborador salió a flote y me puse a hacer llenar las listas de asistencia, mi jefe llegó y me toco hacer otra cosa en un internet cercano al lugar de la audiencia.
Volví tal vez unos 20 minutos después y la audiencia ya había comenzado, me fui a sentar y me encontré con Jeisson uno de esos jóvenes con los que yo trabaja 6 años antes, lo salude, él un poco confuso al verme allí y con la camiseta, sin más palabras me senté y empecé a oír la audiencia. Mi jefe presenta, ella es la encargada del RSDJ. Mis pensamientos empiezan a aparecer, el primero de ellos es de una admiración total, muy pocas lo sabían en la audiencia, pero el esfuerzo que había hecho por organizar la audiencia había sido maratónico, y el solo hecho de aceptar un puesto tan controvertido hace 3 meses es un gran reto profesional. Sin embargo, empieza a presentar y sin duda una presentación demasiado técnica, en mi mente pensaba que ninguna de las personas asistentes le importaba el tecnicismo. Minutos mas tarde sigue hablando un compañero de la Unidad, expone rápido el tema de control ambiental y de los impactos, su tono de voz nunca ha sido llamativo pero hace su labor, se va la luz (yo pienso que ojalá la comunidad no piense mal sobre este percance, afortunadamente no lo hizo), vuelve la presentación esta vez la parte social, de lo cual hace una presentación de igual forma rápida y con números sobre la inversión.
Luego vienen las opiniones de la comunidad, uno a uno, presentan, hablan, de manera peculiar son las personas campesinas las que logran exponer sus reclamaciones de manera más clara y con un tono no combativo. En medio de mis sentimientos encontrados, varios de ellos reconocen la labor de mi jefe, como la única que le ha importado el componente social del relleno, cuando esto pasa, vuelvo y me reconcilio conmigo misma, que la comunidad reconociera el trabajo de mi jefe como algo positivo me tranquilizó y me hace sentir que puede que hace 20 años atrás a nadie le importó el tema pero ahora parece que si, y yo hago parte de ese grupo.
Las personas de la comunidad siguen sus intervenciones, llueve, hace frio, hay refrigerios y almuerzos, todo pasaba a mi alrededor y yo me sentía en un punto fijo donde todo daba vueltas, y mis pensamientos y conclusiones aparecían así: 1) El RSDJ de verdad tienen muchos impactos, ¿cómo los fueron a engañar de esa manera hace 25 años atrás?. 2) el país debería aprender de la comunidad de Mochuelo y los otros barrios, pese a tanto daño y mentiras que han recibido, son pacíficos, dialogan, ponen todo sobre la mesa y están dispuestos a encontrar nuevas soluciones. 3) Esta audiencia esperaba contar con 600 asistentes, si mucho hay 200, es increíble que a la ciudad no le importe este tema y lo relegue a una comunidad y a una sola entidad, cómo los medios no la publicitan, todos se desprenden del problema una vez la bolsa de la basura les sale de la casa, pero eso si se levantan en batallas campantes cuando el carro de la basura no les pasa por la casa. 4) Solo espero que de esta audiencia se puedan sacar cosas positivas para la comunidad, estoy segura que la optimización del relleno se va aprobar por la CAR, ¿pero quién va a resolver las necesidades de la comunidad?, ¿la unidad, solamente mi subdirección?, No! esto no debería ser así! esto tiene que ser un esfuerzo de ciudad, yo entregaré todo en mi trabajo, consiguiendo aliados y financiación, pero es necesario que todo los ciudadanos y entidades colaboren, esto no puede ser responsabilidad de tan solo una entidad!.
Empieza el día con una madrugada que me congeló las manos y la nariz. Se supone que la Audiencia Pública es a las 8:00am. Perfecto, ya voy tarde. El transporte es cosa fácil: Transmilenio, alimentador, carrito, y ya arriba, un bus complementario para Mochuelo Alto. El viento con sus olores del Relleno se empieza a sentir a las 8:30 de la mañana. Decidimos caminar hasta Mochuelo Alto. Pasan 15 minutos y mis cachetes se ponen rojos y empiezo a sudar a pesar de tener las manos dormidas del frío. Echamos dedo, hasta que por fin un carro blindado para por nosotros. Linda la sorpresa al ver que era un candidato a la Cámara que también iba a la misma Audiencia. Mientras me voy sentando y nos van contando quiénes son y porque están ahí estos señores, voy pensando en que sigo sin decidirme si anular mi voto o solo abstenerme.
Bueno, a lo que vinimos. La CAR presenta el orden del día, y luego sigue la UAESP. Estoy acá por el trabajo que he tenido en Mochuelo como voluntaria, y ahora desde la Veeduría Distrital el interés por defender los derechos de la comunidad sigue en pie. Conozco a estas personas. Ellos no me conocerán a mí, salvo algunas. No me importa, me siento como ellos. He visto la dermatitis en varios pobladores, se de la conjuntivitis, se que la tierra ya no sirve para cultivar.
No me gusta la UAESP desde que comencé a investigar sobre el trabajo de la entidad en el Relleno. No aprecio su falta de trabajo (y de ética) por dejar a esta población ser doblemente desplazada, no solo por la violencia si no ahora por temas ambientales. Los escándalos respecto al cuidado del Relleno Sanitario Doña Juana y sus efectos en las comunidades aledañas han sido noticia desde hace varios años. Así mismo, los escándalos desatados por la mal administración de los operadores y las irregularidades en los procesos de licitación (lo cual llevó a la destitución de la entonces directora de la UAESP Miriam Martínez) se suman a una serie de variables que ha hecho que relacione a la entidad con Sauron – gran malvado de los Mochuelos -.
Ahora, me encuentro acá en una Audiencia Pública la cual la UAESP se ve obligada de hacer con la CAR para poder aprobar la ampliación del Relleno. Justamente, se lleva a cabo el 28 de febrero de este año para poder presionar a la CAR para que apruebe la licencia de ampliación con el argumento de que Bogotá esta ad portas de una emergencia sanitaria. Aunque entienda la premura y las razones, me parece un descaro que dejen a la comunidad como última enterada. Mi frustración aumenta. Aumenta en medida que sé que la mayoría de mis amigos no dividen su basura, que yo incluso en mi casa a veces olvido hacerlo y que las consecuencias no se ven en mi entorno, pero si en el de Yuri, en el de Carmen, en el de Olga, en el de Lucy y otras 5,000 personas.
Son las 9:15 de la mañana. La UAESP comienza por presentar una serie de diapositivas de powerpoint sobre la licencia de funcionamiento del Relleno. Solo han pasado 2 minutos y ya abarcaron todos estos temas. Se va la luz y por ese motivo adelantan los refrigerios. ¡Qué delicia! Yogurt de la zona con unas galletas. Vuelve la luz y ahora hay un nuevo señor hablando. El está hablando sobre un dique ambiental y que los impactos negativos son del 75% y los positivos de un 25%. Me gusta que sean honestos. No me gusta que no entren en detalle porque van volando exponiendo todo. Se acaba el tema ambiental, ahora llega otra persona a exponer el tema social. En este momento pienso: Excelente, a esto vine. Mi desilusión es grande cuando solo han pasado 3 minutos y lo único que hacen es mostrar unas cifras en cuadros pequeñitos con presupuestos a ejecutar en el 2014.
Después de esto, comienza a hablar la comunidad. Todas las opiniones coinciden: La comunidad está cansada de tantas promesas y de tan poca acción. Quieren que cierren el Relleno, no quieren una ampliación. El testimonio de varios líderes comunitarios es conmovedor. La frustración es inaguantable. No es posible que los bogotanos seamos tan desinteresados porque no se nos cruza por la cara un viento con un olor insoportable o no se nos para en la comida más de 30 moscas al tiempo o no dormimos con ratas y cucarachas en nuestras casas. No es justo que nuestra pereza acabe con la tierra con la que viven los campesinos, que acabe con el agua, que contamine el ganado, que dañe la piel, los ojos, y los pulmones de miles de personas. No es justo que yo viva tan cómoda en Usaquén, mientras en el extremo sur de la ciudad tengan que aceptar que el Relleno se va a ampliar. Ellos son la mula y nosotros el jinete.
La tristeza me invade, pienso en lo que está a mi alcance. Me guardo las palabras de la comunidad y prefiero estudiar cómo visibilizar la realidad de esos convenios donde la comunidad no ha visto un solo peso. Intento pensar de manera positiva. La UAESP ha cambiado, desde hace 3 meses están más pendiente de la gente. Desafortunadamente, contra estos nuevos funcionarios que quizá sí tienen buenas intenciones, hay contra ellos 25 años que son prueba de la ineficiencia y desinterés del Distrito y sus entidades frente a lo que significa una mejora en la vida de estas personas que gritan con todo su poder que ya no quieren seguir siendo tratados, irónicamente, como basura.
Nunca habría cobrado tanto sentido la frase que pronuncia Steve Jobs en su discurso en la Universidad de Stanford, “todo tiene sentido al juntar los puntos hacia atrás”.
Hoy llegué a mi sitio de trabajo, como un día normal. De todo pensé menos que iba a presenciar un momento histórico para la ciudad Bogotá, la decisión del procurador de destituir a Gustavo Petro y de inhabilitarlo por 15 años. No estaba invitada, 20 minutos antes del evento me enteré de que podía inscribirme. Tomé un taxi hacia el auditorio de la Alcaldía, lugar que hospedaría el Foro “Transparencia y lucha contra la corrupción: un desafío en el Postconflicto”.
Minutos antes de empezar, mi compañera toma una foto del escenario y yo la secundo, a la izquierda el Ministro de Justicia –Alfonso Gomez Mendez-, en el centro Gustavo Petro y a la Derecha un representante de embajada que no entendía lo que sucedería 15 minutos después. De manera jocosa le comenté “el antes y el después” a lo que ella respondió “antes de la destitución”, ¿quién iba a pensar que pasaría tal cual?.
Empieza el foro, se hace una ronda de preguntas, responden en orden, el Ministro, Petro y el representante internacional. La primera ronda de preguntas se hace sobre los desafíos de la corrupción, todos responden desde la definición misma del concepto y Petro menciona que la corrupción sucede cuando se privatizan, no necesariamente los servicios del Estado, sino también los intereses de lo público. Segunda ronda de preguntas, de nuevo responde el ministro, sigue Petro quién levemente menciona algo sobre las basuras –en este momento se cierra la puerta superior del auditorio antecedida de un grito que decía -¡qué es esta seguridad!-. Tercera ronda de preguntas, responde el ministro –en este instante llega más prensa, un par de personas se saltan unos asientos y todo se torna tenso- la moderadora le da la palabra al alcalde y todo sucede así:
La periodista preguntó –señor Alcalde qué opina usted?–, a lo que Petro responde – a partir de este momento no soy mas alcalde– yo pensé que diría la típica frase que anuncia una respuesta como ciudadano y no como funcionario, pero declara:
–ya no soy más el Alcade de esta ciudad, me acaban de destituir, con inhabilidad por 15 años-
Aquí tuvo sentido sus respuestas anteriores, él lo veía venir y por ello cada respuesta se empezó a entender como una defensa. La puerta tuvo sentido, iban a entrar a protestar, los saltos sobre las sillas también encajaban, sus funcionarios se reunían, todo hacia atrás tuvo sentido.
El auditorio aspira, el flash de las cámaras se dispara y mi amiga y yo no podemos creer que la predicción haya sido cierta. Mirando hacia atrás había dos o tres personas con los ojos aguados y de inmediato se escuchó –¡Petro, Bogotá esta contigo!-; en el auditorio retumban las voces mientras Petro termina su declaración, dejando en claro que no iba a decir nada pues tenía que pensar, mientras varios de sus funcionarios de primera línea se ponen atrás (foto # 2). El Ministro por su parte, al terminar la intervención de Petro, anuncia que revisaría la ley que le permite a un funcionario destituir a otro que fue elegido mediante el voto popular, y le tiende un abrazo.
Después de 10 minutos, salimos consternadas con el suceso, el ambiente se había puesto pesado pero decidimos quedarnos un tiempo más, tiempo en el cual los medios tomaban la declaración de algún personaje –que no pude ver pues me había quitado las gafas- pero cuya reflexión quedaba en mi cabeza. Él mencionaba la perjudicial decisión del Procurador en el contexto preciso de las negociaciones de paz, en el capitulo de la participación política, se preguntaba de manera fuerte y con alto tono de voz, sobre las garantías que podría ofrecer el Estado para la participación política.
Salimos del auditorio, escuchando a nuestras espaldas los gritos de apoyo de una persona desplazada. Nos fuimos rápido, la policía empezó a llegar, cruzamos la Plaza Simón Bolívar, caminamos por la séptima, y con mi compañera nos sentíamos en realidad en el “País del realismo mágico”, en las calles de macondo en los días de mercado. Mientras en nuestras cabezas aún recorrían los recuerdos de lo vivido y tratábamos de dimensionar los impactos de la decisión, las personas del comercio y los demás transeúntes ni por enterados se habían dado y por el contrario escuchaban los cañonazos navideños y de fin de año. Nuestra reacción desembocó en ir a comprar el libro “Por qué Fracasan los Países”.
Así transcurrió ante mis ojos el episodio político mas importante de los últimos meses, aún no tengo un análisis serio sobre el tema, mi primera reacción es de indignación con un sistema de control que es más severo con uno que con otros, si bien ser corrupto (caso Samuel o Arias) y saltarse los procesos (caso Petro) están mal, lo cierto es que la inhabilidad de Petro fue desmedida. Es frustrante y desalentador ver y experimentar de primera mano lo que mis papas siempre dicen “la justicia funciona solamente para algunos”.
Solo espero, que años mas adelante, cuando me detenga en un punto de mi vida, pueda mirar hacia atrás, unir los puntos y encontrarle algún sentido a los hechos que suceden en este país, ojala todo tenga sentido porque hacia delante no se proyecta ninguno.
Y sí, el archipiélago es Colombia. Así lo ha reconocido la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en 2007 (con respecto a San Andrés y Santa Catalina) y lo ha reiterado en el 2012 (con respecto a los cayos del archipiélago, dos de ellos quedaron enclavados en aguas de Nicaragua).
Hay cambios en el mapa del país, se ha reducido, queda preguntarse, ¿qué significa esto para Colombia? ¿cuál va a ser el futuro del archipiélago, de su población? ¿desarrollo sostenible, extracción, olvido?… La historia esta por escribirse
Lo confieso. Esta entrada en el blog iba a ser sobre minería informal. Ya estaba todo listo. Pero lo que sucedió ayer en la noche, lo que se vivió en la capital colombiana, me hace dejar el tema minero para una próxima ocasión. Y aunque muchos de ustedes dejarán de leer en el momento en que sepan de lo que hablo, no importa, el partidazo que ganó Millonarios en la fría noche bogotana de este jueves es algo histórico que no puedo dejar pasar.
Para los que siguen leyendo: después de un frio día en la capital, pasado por agua en algunas zonas, empezaron a llegar al Campín, en horas de la tarde, los más de 40 mil hinchas que acompañaron a Millonarios en un épico partido. El ambiente no era de calma, ni de zozobra, como si lo fue contra los rivales de copa anteriores. Había respeto entre la hinchada hacia el futbol de Gremio y no era para menos: Ze Roberto, Gilberto Silva, Elano, Martins ¿quién no respeta a estos jugadores? Pero así como había respeto, había confianza en el embajador, había licencia para soñar.
Las tribunas se llenaron antes del pitazo inicial. Salieron los equipos a la cancha y, como siempre, los hinchas azules dieron un recibimiento de película. Rollos, papel picado, bombas, pólvora y una bandera gigante que cubría la mitad del estadio con los colores azul y blanco y con la bandera de la ciudad. Todo el colorido y la pasión que caracteriza a los hinchas emabajdores. Pasaron los himnos y arrancó el partido.
Partido durísimo, así como en la ida. Millonarios iba a tener que sacar la casta de equipo grande que sostiene la historia de su camiseta para poder vencer a un rival muy ordenado. Pasaron los primeros minutos y no se hacían daño entre ellos. Luego llegó el minuto 13, tiro libre directo para Gremio a unos 30 metros. Disparo, rebote y gol brasilero. Cinco segundos de silencio y de nuevo se escucharon las voces de aliento en el estadio; los hinchas no dejaron de cantar, de alentar.
Millonarios fue a la carga. Wason tuvo un remate al arco con el arquero vencido, que lograron sacar (como fuera) los defensores de Gremio. Luego Harrison pifiaría un remate casi en el punto penal de frente al arco. Concluyó el primer tiempo, la ventaja de los azules brasileros parecía casi irremontable para los azules colombianos.
En el entretiempo las porristas trataban de animar a los hinchas con una rutina nueva, pero los hinchas no sabían qué pensar. Unos decían “se remonta, sí”, otros empezaban a pensar en el torneo local, en el partido del domingo ante el Junior. Volvieron los equipos a la cancha, de nuevo a saltar y a cantar, el apoyo de sus seguidores a Millonarios nunca le va a faltar. Eso está más que claro.
Pitazo del árbitro y los segundos 45 en marcha. Llegó el minuto 60, Pedro Franco jugando delante de la mitad de la cancha tocó el balón para Harrison, este filtró un pase milimétrico para que los defensas de Gremio vieran pasar lentamente el balón hasta los pies de Wilberto Cosme y el delantero azul, solo, definió sutilmente al palo izquierdo del arquero, el balón pegó en el vertical y entró. Gol azul. Empezaba a formarse la sonrisa en los hinchas azules, pero aún faltaba mucho.
Al minuto 80 llegaría el segundo. Harold pelea una pelota al borde del área impidiendo que el defensor brasilero evacue el balón de un zapatazo (cosa que hicieron todo el segundo tiempo). El rebote quedó para Wilberto, quién metió un centro perfecto a la cabeza de Wason y el delantero chocoano definió al palo más lejano del arquero quien simplemente vió el balón entrar. Alegría en las tribunas y tiempo en el cronómetro, se podía ganar.
Ya se jugaba el tiempo de adición. Minuto 91 y Harold es derribado entrando al área grande. El árbitro, muy cerca a la acción, decretó sin vacilar el penalti para Millonarios y en las graderías del estadio ya se empezaban a ver lágrimas de felicidad. Wason, seguro de que iba a convertir, agarró el balón y se aguantó a los brasileros que intentaban intimidarlo. El jugador embajador mostró la jerarquía del equipo al que pertenece, avanzó seguro hacia el balón y definió potente, a media altura, al brazo izquierdo del arquero que adivinó el lugar al que iría la pelota, pero nunca, nunca, la alcanzó. Gol. Millonarios 3, Gremio 1. Estalló el Campín.
Lo que siguió fue total alegría, pasión desbordada, llanto, felicidad, locura y descontrol en las tribunas. Norte, Oriental, Occidental y Sur, junto con los jugadores en la cancha, todos al unísono cantando “ole ole ole ole Millos Millos”. Los jugadores azules mostraron grandeza, la grandeza que se debe tener para jugar en Millonarios. Gremio se fue para Brasil eliminado y los asistentes al estadio, esta fría noche capitalina, terminaron viviendo uno de los mejores partidos de la historia reciente del club embajador. Fue una histórica noche, para la posteridad como me lo dijo el hincha que saltó todo el partido a mi lado en la tribuna sur. Ahora, nos vamos a permitir soñar.
El pasado 5 de Noviembre de 2012, Razón Pública denunció las inconsistencias del proceso de consulta previa que se ha realizado a comunidades indígenas en la Guajira, por un proyecto que busca desviar el río Ranchería para la extracción de carbón. Éste ha sido motivado por la empresa Cerrejón acompañado por el Ministerio del Interior (entidad encargada de la «consulta previa»). Surgen varias cuestiones: 1) No hay solicitud radicada en relación con el proyecto y su licencia ambiental, ¿sobre qué proyecto consultan?; 2) hay una evidente falta de claridad acerca del proyecto ¿cómo es el proyecto?; 3) hay afectación al tejido social, denuncian prácticas de presión e intimidación, ¿es una consulta libre y de buena fe?; 4) los negocios y la infraestructura están dispuestos para dicho proyecto, las decisiones ya han sido tomadas, entonces ¿es previa?.
Este no es el único proceso de consulta previa que en la actualidad esté siendo denunciado. Las comunidades del parque el Tayrona están sufriendo un grave fraccionamiento en tanto, según SEMANA (ver video) los mamos de la sierra avalan el proyecto «Six Senses» que pretende la construcción de un hotel en el parque. Pese a las graves acusaciones de corrupción, de conflicto de intereses, de afectación al medio ambiente y a la cultura de la región, el proyecto renació. No obstante, la «piedrita en el zapato» ha sido la comunidad indígena de los Kankuanos que en su comunicado del 28 de octubre de 2012, señalan cinco puntos fundamentales por los cuales se oponen al proyecto: 1)la reunión se realizó sin los Kankuanos; 2) como kankuanos son uno de los cuatro pueblos indígenas de la «Línea Negra»(por esta razón cualquier proceso de consulta previa debe tener presencia de los cuatro); 3) los procesos de consulta previa no han sido de buena fe; 4) solicita a la revista SEMANA y al columnista Alejandro Arias, en función al derecho de réplica, que tenga en cuenta que los Kankuanos reconocen este territorio como innegociable y; 5) dejan en claro que el acta firmada no puede ser considerada, por ningún motivo, un proceso de consulta previa.
Es imprescindible que la sociedad civil, ONG’s, los medios de comunicación, entre otros, denuncien este tipo de procesos fraudulentos que terminan por afectar a la sociedad en su conjunto. De nos ser así, este es el precedente para futuros procesos y abre las puertas a la corrupción, lesiones a la institucionalidad, el menoscabo de los intereses de las comunidades indígenas y otras minorías, en sí puede determinar la muerte de la consulta previa como derecho de éstas comunidades. Por ejemplo el denominado ecoturismo que se viene implementando de la mano de precarios procesos de consulta previa, pueden abrir las puertas a la locomotora minera en zona protegidas, léase el Tayrona. Así mismo, en la Guajira puede terminar en una situación peor, en la que definitivamente se pasen por alto las comunidades en futuros proyectos. En suma, hay que darle visibilidad a estos procesos para garantizar su transparencia y propiciar la rendición de cuentas.
Nota: Mi felicitación a Paul Bacares por su Premio de Periodismo Simón Bolivar, por el mejor cubrimiento de una noticia, televisión. «La corrupción y privatización de las tierras del parque Nacional Tayrona» de Noticias UNO-NTC Televisión.
«…y la seducción
de tu imaginación
me partieron la cara y
también el corazón…»
LosPetitFellas es un proyecto musical alternativo que nace en el 2006 bajo el nombre de Pet Fella y liderado por su Vocalista: Nicolás Barragán, quien en el 2011 da a conocer su primer trabajo discográfico «Querido Frankie».
Grupo: Los Petit Fellas
Tema: Teorías, Caos y Besos
Álbum: Souvenir
Grupo: Los Petit Fellas
Tema: Burlesque
Álbum: Souvenir
El DANE saca la tasa de desempleo, 9.9% frente a 9.7% del mismo periodo el año pasado. ¿La obsesión de Santos por el «dígito» del desempleo estará modificando las cifras? ¿y qué si en vez de 9.9% hubieran registrado un 10%? ¿Saldría Bustamante el director del DANE? Sinceramente, esto lo veo venir, no lo veo más de un mes en el cargo porque por la coyuntura no veo estabilidad en el empleo del país.
Lo que está sucediendo en Bogotá esta semana es para ponerse a pensar: movilizaciones sociales todos y cada uno de los días de la semana; todas en contra de políticas del gobierno nacional (reforma tributaria, ley Lleras, ley de Cine, entre otras). ¿Hasta dónde puede llegar la movilización ciudadana? Recordemos que en los últimos dos años fue esta la encargada de tumbar la reforma la educación superior y la reforma a la justicia.
DisertArte 